Isaac Asimov es una de las figuras más importantes en la literatura de Estados Unidos al repasar el siglo XX. Nacido en Rusia el 2 de enero de 1920 en una familia judeo-rusa, cuando él tenía tan solo tres años su familia se mudó a Nueva York. Creció en Brooklyn, donde aprendió a leer de forma autodidacta antes de los cinco años.
Desde su adolescencia temprana tuvo una cercanía interesante al mundo literario, comenzando sus primeros pasos como escritor, con 19 años publicó su primera historia de ciencia ficción en una revista.
Cursó estudios de bioquímica y se graduó en 1939 de la Universidad de Columbia, hizo un postgrado en químico y después de su doctorado trabajó como asociado en la Universidad de Boston, permaneciendo allí en ese cargo.
En su carrera como escritor existen varios períodos muy marcados, ya que él no solo se dedicó a la literatura, era un amplio conocedor de las ciencias naturales. Entonces, en la primera etapa predominó la ciencia ficción en su obra, luego, redujo la cantidad de textos de ciencia ficción y comenzó a escribir referente a otros temas.
Después, volvió a escribir sobre ciencia ficción hasta su muerte. Su obra de ciencia ficción está muy marcada por los robots, lo que se conoce como su sello distintivo, se puede decir que Asimov generó un universo alrededor de sus obras de ciencia ficción.
3 libros destacados de Isaac Asimov
Yo, Robot (1950)
Esta es una serie de relatos que se hilan por una línea argumentativa para generar una trama unificada que resulta muy interesante. En estos relatos se cuentan diferentes vivencias con la creación y experimentación robótica, donde el hilo conductor y el enlace entre los relatos es la robopsicológa Susan Calvin.
En la obra se citan las tres leyes fundamentales de la robótica, de hecho, es de los primeros relatos donde Asimov hace referencia a ellas. Son tres leyes que establecen la base del comportamiento de los robots creados por el ser humano, entonces, en esta obra Asimov las cita para comenzar a jugar con los límites de la robótica y lo que significa crear seres inteligentes.
Durante los relatos se muestra la evolución de los robots, desde lo más primitivos hasta los más sofisticados e inteligentes. Todo eso, sin perder de vista que es una obra escrita en 1950, es decir, sentó las bases de la ciencia ficción alrededor de un tema que solo se comenzaba a explorar para el momento: la robótica.
Bóvedas de acero (1954)
En esta novela futurista existen dos civilizaciones, la primera es la Tierra, para ese momento está superpoblada y ha sufrido un montón de daños. Está dominada por bóvedas enormes que encierran a millones de personas. Por otro lado, está la civilización que se desarrolló en los mundos exteriores, cuentan con robots que realizan diferentes tareas y en el pasado tuvieron conflictos bélicos con la Tierra.
Entonces, la novela cuenta cómo el hecho de que un científico del mundo exterior haya sido asesinado pone en juego la estabilidad de ambas civilizaciones. Es el detective Baley, uno de los personajes más importantes de Asimov, quien tiene la responsabilidad de investigar el asesinato.
Es una trama que está narrada de forma excelente, con un desarrollo impecable marcado por el nivel de detalle que expone Asimov para darle todo el contexto que necesita al lector. Así, el autor demuestra todo su ingenio y creatividad para escribir ciencia ficción.
El fin de la eternidad (1955)
La novela se ambienta en una sociedad del futuro que ha logrado materializar los viajes temporales. Han creado una organización llamada Eternidad que se encarga de gestionar los hilos del pasado para conseguir una estabilidad en las civilizaciones.
Entonces, un emisario de la Eternidad, Andrew Harlan, se enamora en uno de los viajes temporales y ahora debe vivir huyendo en las líneas del tiempo para romper toda regla y permanecer juntos.
Este título destaca como uno de los más importantes de Asimov en su carrera, tiene un ritmo vertiginoso desde la primera página, metiendo al lector en una trama realmente interesante que cautiva de principio a fin. Recorre la ciencia ficción con una historia de amor en el medio, unido a la filosofía y las aventuras. Todo esto, se convierte en la mezcla perfecta para que Asimov entregue una obra excelente.
