Maxi y la banda de los tiburones

Novela de aventuras sobre la solidaridad y la capacidad de perdón.
Maxi baja a la calle con Lily para jugar con la banda de los Tiburones. De paso, va a la librería a recoger un libro. Allí, roban el anorak de Lily, donde está el móvil de la madre de Maxi. Éste sale en persecución de los ladrones. Tendrá que pasar por mil aventuras antes de dar con ellos.
Lily va a buscar a Maxi para que baje a la calle a jugar con la banda de los Tiburones. A él no le apetece, pero su madre se empeña; así que bajan. De paso, va a la librería a buscar un libro que le ha encargado su padre. Mientras están en la tienda, entran unos niños y se llevan el anorak de Lily. Pero lo malo no es eso, lo malo es que dentro del bolsillo está el móvil de la madre de Maxi. En la calle, Maxi encuentra el anorak sobre un banco, pero el teléfono ha desaparecido. Así que sale en persecución de los ladrones. Delante del cine Cristal le dicen que se trata de los hermanos Montero y que pueden estar en el mercado de Maravillas. Allí, Maxi tiene un encuentro con un vigilante y su perro que, al final, se hacen amigos de él. Pero no hay manera de encontrar a los Montero. Por fin, Maxi da con ellos, y éstos, le devuelven el móvil sin necesidad de llegar a las manos. Están muy asustados por lo que han hecho. Maxi decide presentarlos a los demás miembros de la banda. Al final, se hacen todos amigos. Maxi vuelve a casa y sus padres no se enteran de nada de lo que ha pasado.