Una de las figuras más importantes en el movimiento del Realismo del siglo XIX, no solo en el territorio español, sino a nivel mundial es: Benito Pérez Galdós. Este autor escribió novelas y obras de teatro consideradas revolucionarias.
Muchos señalan a Galdós como uno de los representantes más notorios de la literatura en español, con críticos de la escritura catalogándolo junto a Miguel de Cervantes.
Sus obras tuvieron un gran impacto en la estructura de la narrativa de las novelas. Su visión se alejaba del Romanticismo, tan abundante en la época.
El estilo de escritura de Galdós se basa en la psicología de cada personaje.
La objetividad presente en sus narraciones le otorgó el gran nivel de popularidad que adquirió, algo que solo había sido visto con Lope de Vega y Cervantes. Esto lo llevó a ser parte de la Real Academia Española como miembro honorario.
Incluso se realizó la propuesta de reconocer su aporte a la escritura con un Premio Nobel de Literatura en el año 1912.
No obstante, ya que Galdós se oponía al poder político y social que las instituciones religiosas tenían, particularmente la Iglesia Católica, miembros de la sociedad en España se opusieron a este premio.
En este artículos, te explicamos acerca de las 3 historias que más destacan en la trayectoria de Benito Pérez Galdós.
Fortunata y Jacinta (1887)
La primera novela en esta lista salió al público en 4 volúmenes publicados durante la primera mitad del año 1887. Los expertos en literatura señalan a Fortunata y Jacinta como la mejor obra de Pérez Galdós.
Además, los críticos señalan que es la perfecta representación del género Realista español del siglo XIX. En este ámbito, es comparada con La Regenta de Leopoldo Alas por su impacto en el movimiento del Realismo en España.
Este relato está ambientado en la ciudad de Madrid, y consiste en la unión de dos mujeres de procedencias y situaciones sociales completamente distintas juntadas por un evento trágico.
El aspecto más destacado de Fortunata y Jacinta es, como toda novela realista, el ambiente en el que se desarrollan los eventos, pintando una Madrid muy singular.
En realidad, la perspectiva que Galdós tenía de esta ciudad era tan única que, luego de la publicación de esta novela, adquirió el término de “El Madrid Galdosiano”.
Esta historia de Benito Pérez Galdós ha recibido aclamación internacional. De hecho recibió diversas adaptaciones, tanto cinematográficas como teatrales.
La primera adaptación destacada la realizó Ricardo López Aranda en el teatro a finales de la década de los 1960. Un año después, el director Angelino Fons se encargó de producir una película basada en la historia.
Doña perfecta (1876)
Años antes de publicar Fortunata y Jacinta, Benito Pérez Galdós saca a la luz un conjunto de historias pertenecientes a sus “novelas de tesis”. La más destacada de ellas es Doña perfecta, quien catapultó al escritor al éxito temprano.
El mismo autor realizó una adaptación del relato en el teatro un par de décadas más tarde, en 1896. Doña perfecta también fue llevada a la gran pantalla en un par de ocasiones, con una versión mexicana y otra española.
Galdós declaró que esta historia fue escrita por partes en un período de tiempo prolongado. Narra la historia de una viuda española enfocada en conservar las costumbres familiares.
Se centra en un drama amoroso entre su hija Rosario y su sobrino Pepe, desencadenándose un romance con un desenlace trágico.
Misericordia (1897)
Benito Pérez Galdós cierra el siglo XIX con una obra que publicó tan solo algunos días luego de terminar de escribirla. Titulada Misericordia, es una de las novelas más notorias del autor en la actualidad.
Aun así, en su momento de publicación no recibió el reconocimiento que presenta hoy en día. Incluso pasaron más de 30 años para la publicación de una segunda edición de la historia.
Pero actualmente es mencionada junto a Fortunata y Jacinta como las obras más emblemáticas de Galdós.
Misericordia es la obra de Galdós que más adaptaciones ha recibido, tanto en el cine como en el teatro y hasta en la televisión.
Ha sido analizada por figuras literarias importantes tales como María Zambrano por la incorporación del Espiritualismo en la historia.
