Nadie que conozca la pelĂcula basada en esta novela podrĂĄ olvidar la voz en off que recita la frase inicial de la obra mĂĄs lograda de Daphne du Maurier: Rebeca. AsĂ comienzan los recuerdos de la segunda señora De Winter, que la transportan de nuevo a la aislada y gris mansiĂłn situada en la hĂșmeda y ventosa costa de Cornualles. Con un marido al que apenas conoce, la joven esposa llega a este inmenso predio para ser inexorablemente ahogada por la fantasmal presencia de la primera señora De Winter, la hermosa Rebeca, muerta pero nunca olvidada. Su habitaciĂłn permanece intacta, sus vestidos listos para ser lucidos y su sirvienta, la siniestra señora Danvers, aĂșn le profesa una devociĂłn malsana.
Y con el espeluznante presentimiento de que algo maligno le estĂĄ aprisionando el corazĂłn, la joven comienza a investigar el verdadero destino de Rebeca: el oscuro secreto de Manderley.




